Situado en una tranquila calle lateral que sale a la carretera principal, cerca de la entrada del pueblo de Varadero, Villa Tortuga está rodeada por una exuberante vegetación, lo que contribuye a su ambiente relajado. Su diseño abierto hace que parezca que uno está al aire libre, empezando por la recepción y el lobby bar (con camareros vestidos con elegantes uniformes), hasta los edificios de poca altura que albergan las habitaciones.
Junto a la entrada principal dando hacia la calle – hay una cautivadora terraza donde los huéspedes pueden disfrutar de un café, espresso o capuchino.
Situada en el centro del establecimiento y flanqueado por palmeras y jardines, la piscina decididamente juega un papel protagónico. El Ranchón contiguo – una estructura de madera rústica con techo de hojas de palma – ofrece bebidas frías y aperitivos. Detrás de esta zona está lo que le ha dado la fama a Varadero: una fabulosa playa.
Además de nadar en el mar o en la piscina, hay un montón de otras actividades. Hay una mesa de billar justo al lado del lobby bar, y podrá disfrutar de deportes no motorizados como kayak, catamarán y windsurfing, o jugar voleibol y ping-pong.
Hay tres restaurantes (incluyendo 2 a la carta), pero si da un paseo por el pueblo y encontrará muchos otros restaurantes para elegir.
Villa Tortuga es un acogedor hotel tres estrellas, sencillo y sin lujos, favorecido por muchos huéspedes que regresan buscando precisamente estas cualidades. Sin embargo, si prefiere más lujo (calidad de 4 estrellas o más), podrá elegir entre alguno de los hoteles más al norte de la península, aunque realmente las playas no son superiores